CrowdEquity es, por concepto, una herramienta para democratizar las inversiones en cualquier economía. Permite la entrada al capital market a los inversores pequeños- previamente restringido a los fondos estructurados y las grandes fortunas – fuera de las bolsas de valores convencionales. Esta posibilidad, además de representar la democratización y la inclusión de esta capa de inversión, también produce un mayor volumen de capital que fluye hacia nuevos negocios más pequeños (startups en etapa inicial). Para Latinoamérica, este tipo de solución financiera tiene mucho valor. Se espera una verdadera explosión (positiva) de vehículos de crowdfunding en Brasil como resultado de los efectos de la Resolución CVM 88, que ha relajado y ampliado las reglas para la recaudación de fondos y el funcionamiento de las entidades en el país.